Y no es una opción cualquiera: la mejor manera de salir del paso si tienes una fiesta y quieres ir cómoda, es comprarte una falda de tejido brillante, piel o lentejuelas y combinarla con una simple tank top de algodón, a poder ser, blanca. Que el binomio blanco y negro nunca falla y resulta siempre elegante.
Es una apuesta fácil y muy resuelta, no hace falta comprarse un vestido demasiado extravagante o parecer disfrazada si algún día se tiene un evento un poco especial, total, una camiseta blanca la tiene todo el mundo, y una falda negra, a poder ser tipo silueta lápiz y cintura alta, que siempre es más adecuada, siempre la vas a poder reutilizar.
La clave, aparte de la acertada elección de los complementos (véase tiara de Nicole Richie), es la mezcla de tejidos, yo soy una fan de esta opción, eso de mezclar lana con seda, jean con tafeta o algodón con piel, me parece genial, y es la mejor manera de desdramatizar si se lleva un tejido demasiado regio o clásico. Me pasa lo mismo con los estampados, siempre digo sí a cuadros con rayas o flores con leopardo. Y es que quién no arriesga, no gana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario